Díptico original que explora la conexión entre la mente y el espacio. Sus perfiles abstractos, trabajados en tonos cálidos y negros intensos, invitan a contemplar la dualidad del ser y la comunicación silenciosa. El marco de espejo negro aporta un brillo contemporáneo que realza cada trazo, convirtiendo estas piezas en un punto focal sofisticado para cualquier ambiente. Perfecto para coleccionistas y amantes del arte moderno que buscan una obra con fuerza conceptual y presencia única
Rostros del Silencio
Óleo sobre tela con técnica mixta.